Qué bonita palabra para estos días de calor. En Marraquesch te venden agua por las calles, de la cual no podría beber. En donde juego al golf hay un hombre amoroso, sencillo y humilde que cambia los bidones de agua para que la tengamos fresca. Es esa mano que hace que las cosas sean buenas; cuántas hay que no conocemos y es por eso que las quiero homenajear ( siempre con mi palabra).
Tengo un lema en la pared de en frente a mi cama que leo cada mañana; es de Mafalda y dice así: “Si no fuera por todos, nadie sería nada”