Mi despedida a esta ciudad interesante y heladora y la de todos los daneses que protagonizaban su propia despedida en homenaje al príncipe, marido de la reina Margarita de Dinamarca .
El pueblo le ha rendido homenaje con flores , dedicatorias y detalles como coronas de papel..y pensar que esto lo he vivido en vivo el jueves y ayer viernes que quise pasar para ver la densidad de flores, cada cual más bonita..era emocionante ver a las personas caminando por cualquier calle con flores, sabiendo que serían de ofrenda..muchos padres con sus hijos, personas apoyándose en la acera para escribir notas de agradecimiento..
Salvas de cañón se han disparado en Copenhague en su honor, las banderas de todos los edificios gubernamentales del país han ondeado a media asta.
Marisa
Qué relativo es todo, el príncipe siempre fue un “personaje” controvertido, aparentemente poco considerado por el pueblo y particularmente, según la prensa, poco adaptado al papel que le tocó o que le obligaron a tener, incluso su propia mujer y resto de la familia. Aun así, la gente lo despidió en gran número y llenó de flores algunos lugares. Como siempre, o casi, todo tiene dos caras, dos lecturas, dos colores…
Abrazos.