Recuerdo en mis veranos en Mallorca, las marcas de las olas en el mar al navegar..me gustaba ver las formas y percibir la diferencia entre unas más grandes y otras chiquitas con espuma..
Pues bien, después de mi paso por Buenos Aires, siento que dejo una estela firme por la vida que llevé tan completa; si bien la primera semana la pasé floja por salud, cierro este día de hoy con broche de oro pues ya esta noche regreso..
Has sido días de museos, de paseos, de amigos del alma, de misas, de fiestas de la vida, de complicidad, de confidencias, de recuperar el tiempo perdido, de lectura, de escribir, de ilusión y sobre todo de mucho amor y libertad.
Gracias a esta ciudad del alma que me arrulla y me quiere bien.