Ya quedan horas para tomar las uvas en España y celebrar brindando por el nuevo año. Quién diría que llega ya este número cuando recuerdo la conmoción por la llegada del 2000..hacía pensar en la novela de 20mil leguas de viaje submarino..
Parece que me fuera por las ramas para no afrontar el cierre, pero es que no quiero despedir el año ni tampoco me gusta decir que deseo que se vaya ni me hace recordar malos momentos..para nada ¡ Han sido muchos días de aprender, de crecer, de vivir, de compartir, de viajar, de disfrutar de los amigos queridos, de salir de casa cada día volando como una mariposa, de lágrimas y de mucha fuerza, de muchísimo amor, de pálpito constante, de conocer nuevas personas, de retos cumplidos, de escucha interior, de aumento de fe, de dedicación constante a mis hijos, de darme entera, de sufrir por todo,de menso salud, de volver a reír poco a poco, de querer dentro del corazón, de muchas horas de diario Verili, de mucho pensar en vosotros, en cada uno de vosotros sin conoceros, pero ya tenéis vuestro asiento cada día, de dormir poco, de no poder teclear, de no sentir a la Vero de antes , de soñar mucho, de menos es más, de liberación, de recuperar la alegría, de necesitar tiempo, de humildad, de no poder, de mucho silencio, de rico olor, de recuperar mi tono vital, de profundizar, de decir mucho que quiero, de desprendimiento, de sentirme muy pequeña, de desear vivir y de dar garcias cada segundo del día por cada cosa pequeña
Tengo mucho que mejorar y aprender y será mi propuesta para este año nuevo.
Nosotros seguiremos aquí, cada día, con más amor si cabe y con mucho gozo en cada diario y deseando que mis palabras al abrir esta caja de sorpresas os sirvan de mucho.
Viva la vida ¡¡