Es el momento de lucirlos quien los tenga. A mí nunca me gustaron, pero respeto los gustos de los demás. Recuerdo que de pequeña sólo tenía tatuajes un determinado sector de la población, además de Popeye. Cuando estudiaba los veranos en Londres, se veía otra apertura de cara a este mundo. Hubo un boom que creo va bajando, debido a la salud y la higiene. Hay gente que se hizo alguno en lugares secretos para que los vea quien tenga que ser; no son de exposición al público. La mujer de la foto los tenía exactos en el mismo lugar y “a la misma hora”. Un día me pegan..