Nadie tiene derecho a quitar la vida a nadie, por muy malo que sea.
No a la pena de muerte; sí a los trabajos forzados y a pagar en vida.No voy a entrar en detalles políticos ni pretendo contradecir a nadie..somos libres todos en este lugar.
El mundo celebra la muerte de Bin Laden mientras recordamos las miles de víctimas que inocentemente murieron por su causa; benditos sean ellos y sus familias. Aún así, a pesar de su infinita maldad, me apena que haya que llegar es este extremo.
Ayer que comimos en familia salió el tema y yo opiné firmemente que como cristiana no apruebo matar a nadie; por mucho q me pongan el ejemplo de y si mataran a un hijo mío..ojalá no llegue a ocurrirme ninguna desgracia con ellos y tampoco sé cómo reaccionaría, pero dudo que llegara al “ojo por ojo, diente por diente..”
El término ley del talión (latín: lex talionis) se refiere a un principio jurídico de justicia retributiva en el que la norma imponía un castigo que se identificaba con el crimen cometido. De esta manera, no sólo se habla de una pena equivalente, sino de una pena idéntica. La expresión más famosa de la ley del talión es “ojo por ojo, diente por diente” aparecida en el Éxodo veterotestamentario.
Históricamente, constituye el primer intento por establecer una proporcionalidad entre daño recibido en un crimen y daño producido en el castigo, siendo así el primer límite a la venganza.